Washington, DC - Los sistemas de trata de personas pueden tomar distintas formas y afectar a muchos tipos diferentes de víctimas. El Protocolo de Palermo, ampliamente ratificado, exige que los gobiernos penalicen la trata de personas y los delitos afines. La trata es un delito oculto cuyas víctimas suelen mostrarse renuentes a cooperar con las fuerzas del orden. Para combatirla eficazmente, los órganos responsables de las labores de identificación, investigación y enjuiciamiento necesitan tener amplia y profunda experiencia práctica, e incluso estar familiarizados con el espectro de tácticas empleadas por los tratantes de personas y con las necesidades singulares de las víctimas.

Para realizar con éxito la identificación e investigación de los delitos de trata de personas y el enjuiciamiento de los sospechosos de esos delitos se necesita tener profunda experiencia práctica especializada en la detección de los indicadores de la trata, la estabilización y protección de las víctimas y la investigación de la conducta de los tratantes, lo que puede extenderse tanto a jurisdicciones nacionales como a fronteras internacionales.

Las unidades de enjuiciamiento dedicadas a la lucha contra la trata desempeñan una función crítica en las labores exhaustivas por combatirla en muchos países. Estas unidades ofrecen experiencia práctica en la materia en enjuiciamientos en casos de trata de personas a menudo complicados y desempeñan una función clave en la coordinación de una variedad de partes interesadas de todo el gobierno que se necesitan para llevar con éxito ante la justicia toda la gama de delitos de trata de personas. Las unidades de esta naturaleza que han recibido la debida formación en materia de estrategias contra la trata de personas, centradas en las víctimas y basadas en información sobre el trauma tienen mayores posibilidades de ganarse la confianza de las víctimas que se presentan en calidad de testigos y de crear alianzas con sus proveedores de servicios y sus defensores, explorar las complejidades que a menudo surgen en el proceso y asegurarse de que se ofrezcan protección y servicios a las víctimas.

Además, las unidades de enjuiciamiento dedicadas específicamente a labores de lucha contra la trata de personas pueden hacer que se realicen enjuiciamientos difíciles en casos de trata que sienten precedentes y siguen adquiriendo experiencia práctica año tras año.

¿QUÉ ELEMENTOS SE NECESITAN PARA QUE LAS UNIDADES DE ENJUICIAMIENTO EN CASOS DE TRATA DE PERSONAS SEAN EFICACES?

» Personal dedicado a la lucha contra la trata con vasta experiencia centrada en la identificación e investigación de casos de trata con fines de explotación laboral y sexual y enjuiciamiento de los sospechosos de esos casos.

» Funciones de liderazgo en la creación de alianzas sólidas contra la trata de personas, incluso alianzas:

»    dentro del sistema de justicia penal (por ejemplo, investigadores financieros, fiscales de casos de delincuencia organizada, etc.);

»    con otras autoridades gubernamentales e intergubernamentales (por ejemplo, organismos de inmigración, autoridades laborales, gobiernos locales, homólogos extranjeros de las fuerzas del orden, etc.);

»    con interesados externos (por ejemplo, proveedores de servicios no gubernamentales a las víctimas, grupos de defensa de las víctimas y los sobrevivientes, organizaciones al servicio de poblaciones vulnerables, etc.).

» Programas de capacitación integral para ofrecer formación especializada en la identificación e investigación de casos de trata, y el enjuiciamiento de los sospechosos de ese delito, incluso a la policía, las patrullas fronterizas, los fiscales, los jueces, los organismos gubernamentales y los trabajadores sociales.

» Compromiso de impulsar sistemas de lucha contra la trata de personas que sean integrales, se centren en las víctimas y tengan información sobre el trauma.

» Concentración en los casos internos y transnacionales de trata de personas.

» Cobertura geográfica nacional para asegurarse de que haya coherencia en las respuestas y prácticas centradas en las víctimas en todas las regiones (sin limitarse a la capital).

» Priorización de la eficiencia para reducir el tiempo necesario para finalizar los casos.

Un creciente número de gobiernos ha establecido y aplicado prácticas prometedoras para mejorar el enjuiciamiento de los sospechosos de casos de trata de personas. Como parte de las labores para fortalecer la respuesta del sistema de justicia penal, muchos países tienen ahora unidades y tribunales de enjuiciamiento dedicados a los casos de trata y proporcionan formación especializada a los jueces, fiscales y fuerzas del orden, entre otros.

» En Guatemala, la Fiscalía General (el Ministerio Público o “MP”) amplió su Fiscalía contra la Trata de Personas e inauguró una nueva Agencia Regional contra la Trata de Personas en abril en Quetzaltenango, ciudad que ocupa el segundo lugar entre las más grandes del país. La nueva oficina cubrirá a nueve departamentos que alojan al 38% de la población nacional, incluso a la más cercana a la frontera mexicana, donde tradicionalmente ha habido poca cobertura en materia de enjuiciamientos de sospechosos de casos de trata por parte del Ministerio Público. La nueva oficina agregará otros 12 miembros al equipo de lucha contra la trata. Al cambiar su enfoque hacia casos más complejos, la oficina especializada del Ministerio Público, junto con la Policía Nacional Civil, hará redadas en gran escala de las redes de trata de personas.

» Tailandia estableció el Departamento de Combate a la Trata de Personas en la Fiscalía General en octubre de 2015 que funcionará en forma paralela con la división de la Real Policía Tailandesa contra la trata de personas, y la División Especial contra la Trata de Personas dentro del Tribunal Penal en Bangkok (establecido en agosto de 2015). La unidad de trata de personas se encarga de todas las tareas realizadas por la Fiscalía General en relación con los casos de trata y enjuicia a los sospechosos de esos delitos dentro de la jurisdicción del Tribunal Penal de Bangkok, en tanto que los fiscales públicos locales siguen tramitando los casos en cada provincia. Los casos complejos o los que pueden involucrar a funcionarios públicos

se pueden trasladar a la unidad de trata de personas en Bangkok. La unidad de lucha contra la trata de personas de la Fiscalía General capacita a los fiscales en las provincias en lo referente a las técnicas para enjuiciar con eficacia a los sospechosos de delitos de trata de personas y, a partir de diciembre de 2016, se exige que los fiscales públicos presenten todos los casos de trata de personas a la unidad para su consideración.

» En los Estados Unidos, el Departamento de Justicia creó una Unidad de Enjuiciamiento en Casos de Trata de Personas (HTPU, por sus siglas en inglés), un órgano especializado dentro de su División de Derechos Civiles en 2007 para consolidar la experiencia en materia de enjuiciamiento de sospechosos de esos delitos. La HTPU ofrece experiencia práctica en los campos de trabajo forzoso, trata transnacional de personas con fines de explotación sexual y trata sexual de adultos. La Sección de Explotación de Menores y Obscenidad (CEOS, por sus siglas en inglés) de la División Penal, creada en 1987, ofrece experiencia práctica en materia de explotación sexual de menores de cualquier forma, incluso, trata de menores extranjeros y nacionales con fines de explotación sexual, trata sexual de menores facilitada por la tecnología y turismo sexual de menores.