Washington, DC - La reciente liberación de más de 100 ciudadanos nicaragüenses que fueron encarcelados por ejercer sus libertades fundamentales significa que esos nicaragüenses, que han hecho un gran sacrificio en la lucha por una democracia genuina en Nicaragua, se reunirán con sus familias y seres queridos.
Sin embargo, mientras docenas aún siguen en prisión, el gobierno de Nicaragua ha impuesto condiciones legales a la liberación de los que ya fueron excarcelados. Estados Unidos reitera su llamado en favor de la liberación no condicionada de todos aquéllos que han sido detenidos arbitrariamente en Nicaragua. Rechazamos categóricamente la denominada “amnistía general” que absolvería a los que participaron en los abusos y violaciones a los derechos humanos a la vez que sigue prohibiendo el ejercicio de los derechos humanos fundamentales del pueblo nicaragüense. A pesar de las medidas tomadas recientemente por el gobierno y la Asamblea Nacional de Nicaragua, Estados Unidos y la comunidad internacional continuarán exigiendo la rendición de cuentas de los responsables de las ejecuciones extrajudiciales, los abusos a los derechos humanos y la represión.
Apoyamos al pueblo nicaragüense en su llamado para el restablecimiento de la democracia mediante elecciones anticipadas, libres y justas. En lugar de una amnistía para los violadores de derechos humanos, demandamos una plena rendición de cuentas de los crímenes cometidos por las fuerzas del orden nicaragüenses, incluyendo su participación en la muerte en prisión el pasado 16 de mayo del prisionero político estadounidense-nicaragüense Eddy Montes.